Fundación Barco Logo

La educación indígena tradicional, una apuesta por la pervivencia cultural

Embárcate en un viaje transformador a la vereda El Cairo, en el departamento del Cesar. Allí, acompañamos a la comunidad Arhuaca de la Institución Educativa Sewaju en la construcción de su proyecto pedagógico. Este proyecto tiene como objetivo proporcionar a sus niños y niñas una educación que les permita adquirir los conocimientos necesarios para construir un mejor futuro, sin que ello implique perder su cultura y tradiciones. ¡Descubre cómo este proyecto abraza la preservación cultural y la autonomía indígena!

La educación indígena tradicional, una apuesta por la pervivencia cultural

Los Arhuacos, también conocidos como Iku o Wintukwa, son una comunidad indígena con una rica herencia cultural. Son reconocidos por su profundo vínculo con la naturaleza y su búsqueda de equilibrio entre el mundo espiritual y el terrenal. Su organización se basa en principios de autoridad espiritual y son guardianes de tradiciones ancestrales, idioma y conocimientos que han transmitido de generación en generación. Respetuosos con la tierra y la vida, los Arhuacos desempeñan un papel crucial en la preservación de la diversidad cultural y ambiental en Colombia.

En 2018, con la convicción de extender este legado, Bruno Chaparro, docente Arhuaco, sin más recompensa que su propia satisfacción, asumió el compromiso de apoyar el proceso de educación de las futuras generaciones de su pueblo.

Este lugar de la geografía colombiana se ha convertido en el epicentro de una iniciativa transformadora que busca preservar y fortalecer las raíces culturales de las comunidades indígenas con el acompañamiento de ISA y sus empresas en alianza con la Fundación Barco. Además, el fortalecimiento de las metodologías de formación en la I.E. Sewaju contó con un proceso de consolidación e implementación del Proyecto Educativo Comunitario (PEC) que es requisito para que la comunidad pueda validar su Sistema Educativo Indígena Propio (SEIP) ante el Ministerio de Educación Nacional. 

“La escuela lleva un proceso, desde el 2018, en el que anteriormente los alumnos pertenecían a la escuela ‘no indígena’, pero en vista de que nosotros como indígenas tenemos que resaltar los conocimientos tradicionales y siempre ir basado a los conocimientos de nuestra cultura, (…) decidimos crear nuestra propia escuela, porque como muchas veces decimos, la escuela se hace desde el conocimiento, desde la práctica, desde el campo”

Y es que, actualmente, los modelos de educación tradicional no se alinean con los sistemas educativos indígenas propios. Esta es una de las razones por las que este proyecto avanza con éxito gracias al trabajo arduo de la comunidad que busca impulsar su Plan Educativo Comunitario (PEC) para así lograr consolidar la autonomía y la capacidad administrativa que les permita asumir un proceso de pervivencia cultural a través de la educación.

“Nos han dado la mano para sacar adelante este proceso (…) Nos hemos llenado de mil felicidades con los niños, ya que acá pueden no solo llenarse de estudios foráneos, sino conocimientos que acá tenemos. (Pueden) reforzar y sacar adelante el proceso y adquisición de nuestros espacios”.

El acompañamiento a las comunidades indígenas de la Sierra Nevada de Santa Marta es un ejemplo de cómo se puede contribuir a la protección de su cultura y sus conocimientos ancestrales, al tiempo que se les brinda a sus miembros mejores oportunidades de educación y bienestar. Frente a modelos educativos tradicionales que no se alinean con las cosmovisiones indígenas, este proyecto va más allá de la educación convencional; se trata de un viaje hacia la preservación de identidades y la consolidación de la autonomía indígena.

Rescatar los conocimientos ancestrales es un compromiso compartido por docentes, autoridades tradicionales y aliados externos, unidos en la noble tarea de construir un futuro donde la riqueza cultural del país florezca en cada rincón, especialmente en aquellos donde la conexión con la tierra y la identidad ancestral es más profunda.

Este viaje ha sido un testimonio vivo de la conexión entre la preservación cultural y la autonomía indígena. Con el respaldo de ISA y sus empresas en alianza con la Fundación Barco, la comunidad ha forjado un sendero único, donde la educación se entrelaza con la tradición, y el compromiso con la tierra y la identidad ancestral florece en cada paso. Este es solo el comienzo de un capítulo donde la diversidad cultural de Colombia brilla guiada por el esfuerzo colectivo de aquellos que creen en un futuro arraigado en la riqueza de sus raíces.

Tú puedes hacer posible nuestra próxima historia.
Apoya el futuro de la educación en Colombia